Conectividad intuitiva: la seguridad y la alta tecnología se dan la mano en el Honda e
¡Adiós, botones, palancas, interruptores, retrovisores! El salpicadero de nuestros automóviles está cambiando a la velocidad de la luz. La llegada de las tecnologías de la comunicación y la información (las famosas TIC) a nuestros automóviles ha convertido el panel de instrumentos en un festival de alta tecnología lleno de luz, color y una cantidad de datos y funciones inimaginables. Es natural, pues, que tengamos preguntas: ¿para qué sirve? ¿Cómo se usa? ¿Es seguro?
Reflexionamos sobre estas cuestiones a partir del ejemplo del Honda e, el nuevo eléctrico urbano galardonado con el premio de diseño “Red Dot: Best of the Best 2020”. La propia palabra «salpicadero» nos remite a los tiempos en que, por toda tecnología, los conductores contaban con un tablero en forma de L que los protegía de las más que probables salpicaduras de agua y barro.
A lo largo de la historia se fueron incorporando elementos que permitían al conductor controlar una serie de datos clave: velocidad, nivel de combustible, kilómetros recorridos… Y así llegamos a nuestros días, en que «salpicadero» ya no parece un nombre apropiado para el sofisticado entorno puramente digital. Muy similar al de nuestros adorados smartphones, que envuelve al conductor.
Conectividad avanzada
Siempre con la vista puesta en la seguridad en la carretera, la conectividad de próxima generación que propone Honda se avanza a los nuevos estilos de vida marcados por la llegada de las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial. Todos los futuros modelos de la marca estarán equipados con tecnologías de conectividad avanzadas, empezando por el Honda e y el nuevo Jazz e:HEV.
